viernes, 26 de abril de 2013

Recibe clase en su casa porque lo acosan en el colegio( Exploradora externa)



¡  Hola !

Seguro que todos hemos oído alguna vez algún caso de acoso escolar. Ayer leyendo las noticias vi esta noticia y quería  compartirla con vosotros.

«A principio de curso nuestro hijo se quejaba de que había un compañero de clase que le daba collejas, patadas y le insultaba». Así comienza a relatar Guillermo, padre de Izzan, el calvario que vive la familia Castro Prado desde hace unos meses.

El pasado mes de marzo, Izzan, el menor de once años, sufría una nueva agresión por parte de un compañero de clase. «Después de recibir un golpe fuerte en la entrepierna, mi hijo se cayó redondo en el colegio y nadie lo atendió, nadie se percató de que cayó al suelo. Mi hijo me contó que no era capaz de respirar por el golpe, que le costaba tomar aire, estuvo más de diez minutos en el suelo y nadie lo auxilió —reitera Guillermo—. De hecho, volvieron al aula, e Izzan por miedo a la represalia del niño no decía nada aunque tenía mucho dolor». Entonces, advirtió a la profesora de lo que le había pasado. Ella, a su vez, avisó a la directora que, primero, interrogó al niño. Quería saber lo ocurrido. Izzan contó que el mismo compañero de veces anteriores le había agredido.

 «Hablamos con su profesora en un primer momento y nos dijo que estuviéramos tranquilos, que eran más niños los que se quejaban, más padres, y que iban a tomar medidas. Luego apareció en escena otro niño más, que se juntó con este. Eran como los "matones" de la clase, y los dos iban contra mi hijo», cuentan los padres de Izzan.

La dirección empezó a investigar e interrogó a todos los compañeros del aula. No solo les cuestionó, sino que les recriminó, de alguna forma, por no haber dado la voz de alarma. «No lo hicieron porque tenían miedo a las represalias del otro niño y a los castigos de la profesora. Porque siempre que había algún conflicto en clase acaban perdiendo todos, los buenos y los malos», mantiene Guillermo.
Pero para el padre, el último paso que dio el centro debería haber sido el primero. «Yo creo que no tendrían que haber interrogado a nadie si no que tendrían que haber llamado a una ambulancia y ya se depurarían responsabilidades».

Foto de Chesi - Fotos CC en Flickr


Ante la gravedad de los hechos, tanto la profesora de 5º curso de Primaria como la directora del Santa Cristina aseguraron a Guillermo que el menor agresor sería expulsado del centro.«Agresión» y ¿expulsión?

Al día siguiente, Izzan cuenta a sus padres que el niño que le agredió no estaba expulsado, que había ido al colegio y que se había reído de él en varias ocasiones. Se mofaba de cómo caminaba el agredido.
Las medidas adoptadas con el menor agresor, fueron dos semanas sin actividades extraescolares y complementarias. Privado de recreo y sin excursiones. «Era una falta leve. Un castigo por una mala conducta», apuntan fuentes de la Consejería de Educación.

Este es el enlace de la noticia si queréis leer la noticia completa.


7 comentarios:

  1. Algo estremecedor, que nos enseñen en esta carrera a saber identificar los casos de bullying y cómo enfrentarse a ellos y que veas cómo otros profesores y directivas pasen, casi de largo, de estos problemas tan espeluznantes. Una vergüenza.
    Un saludo desde "Educando voy, educando vengo".

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    1. La verdad que cuando lo leí me quede helada, pero como futuros maestros tenemos que saber que estas cosas también suceden en la realidad y aprender, tal y como dices, a saber identificarlos y solucionarlos.

      Un saludo, MEYA! :)

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  2. Me parece muy triste esta noticia. Pero lo peor es el castigo tan leve que recibe el niño "agresor", que dudo que con eso vaya a cambiar. El colegio debería de actuar de forma distinta o actuaciones como esta se repetirán.

    Un saludo.

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    1. Hay que buscar otra solución a este problema, pues como vemos la medida escogida no ha cambiado para nada la situación en la que se encuentra el niño agredido, el agresor sigue mofándose de él, y me parece algo como bien dices, muy triste.

      Un saludo, MEYA! :)

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  3. Me parece muy triste que pasen cosas así con niños tan pequeños, y lo peor no es eso, lo peor es que el centro no toma las medidas necesarias ni para prevenir hechos como estos ni tampoco las medidas para solucionarlas. Poca sanción me parece para acosaciones y agresiones de este tipo.
    Muy buena noticia; me gusta mucho el diseño del blog! Enhorabuena Meya.
    Un saludo del explorador interno de "Primagisterio".

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    1. Pienso como tú, el centro debería poner más empeño en solucionar problemas de este tipo. Nos agrada que te guste la noticia! :)
      Muchas gracias Pablo!

      Un saludo, MEYA! :)

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  4. Creo que el castigo no debería ser puntual, porque luego lo olvidan. Sino una tarea que tenga que realizar todo el año para enmendarlo(si se puede), como por ejemplo lo de recoger las papeleras, subir las sillas de las mesas, etc.

    Saludos de Brainstorming.

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